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unlugardondearder

Goal

Goal Siempre jugué al baloncesto. Desde los 6 años, en el colegio. Grandes momentos, grandes frustraciones también, pero la seguridad de que había escogido el deporte correcto. Pero la vida me llevó a trabajar hablando y viendo fútbol casi a diario. Y el fútbol, lo reconozco, tiene un halo de misticismo del que carece el baloncesto. El baloncesto más técnico, el que practicaba mi ídolo Drazen Petrovic, quedaba inerte y apagado sin el físico al lado. Los mejores jugadores del mundo eran verdaderos atletas. Mis jugadores preferidos en un campo de fútbol siempre fueron tipos normales con una chispa curiosa en la mirada. El sábado estuve en el Bernabéu viendo el derbi. Volví a caer rendido ante la clase de Guti, me encantó Agüero, me asombró la efectividad del buen fútbol de Sneijder y me sobra el pistolero Drenthe por todos sitios. El buen fútbol es tan necesario como el buen cine o la buena música. No todos lo aprecian y a veces prima el resultadismo. A veces están por encima los ruiditos en un disco de Wilco o los efectos especiales en una película con un mal guión. Pero al final siempre está el arte. Además volví a chillar cuando marcó el Madrid. En la zona de prensa no podía... Sólo Roncero está habilitado para tal fin...

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