Los Secretos, TVE1 o el síndrome Juan Pardo

Cómo convertirse en una señora vieja en veinte años y pasar de ser un revolucionario musical, uno de los estandartes de la modernidad menos discutidos a ser el reclamo de los programas de entretenimiento de antes de las 20 de la noche. Juan Pardo lideró a los Brincos, acaso el mejor grupo español de los años 60, con actuaciones memorables, como salir borracho a cantar 'Un sorbito de champán' en una actuación de Nochevieja. Le tuvieron que retirar del escenario. Luego vinieron los años malos, la caída del franquismo y la apatía a la hora de luchar contra el aire. Claro, con Franco siempre había un blanco de ese sentimiento de capacidad crítica absoluta. Después... Anduriña y a volar. Ahora debate su tiempo entre hacer re ediciones masteriazadas de sus mejores temas con Junior y los demás. Fernando Arbex aún tiembla cuando recuerda que compartió grupo con ellos...

El caso, y a lo que viene la paja mental esta, es que el otro día vi a Los Secretos en un programa musical de TVE1. Ese grupo que pasó por ser el estilete de la modernidad en tiempos de la movida, que trajo el movimiento Nu age del mismo centro de Londres, y que compartía entre sus vinilos más destacados desde lo último de Elvis Costello con sus Atractions hasta los discos más extravagantes de Tom Petty en sus años lisérgicos.  En el programa del otro día era un grupo que ha dejado sus mejores momentos para los DVD's de homenaje. Lamentables. Sin gracia, tocando por la pasta como si el espíritu se quedara fuera del plató. Músicos así no merecen seguir.